Me encanta poner las manos en las piedras viejas... porque cuentan historias... Es como si me transmitieran, en un segundo, la forma de vivir de toda la gente que apoyó su mano allí a lo largo de los siglos... Manos que construyeron, que defendieron, que destruyeron, que vigilaron...
Me gusta imaginar la vida de esas gentes que pasaron por allí antes que yo... Qué sentirían, qué pensarían... Seguramente sus vidas serían totalmente distintas a la mía... pero estoy segura que sus sentimientos serian muy parecidos...
En la muralla...
domingo, 12 de agosto de 2007Flipó Izel a las 16:49
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3 Cotilleos:
Cuando paseo por zonas más antiguas (por ejemplo, las murallas de Tarragona... patrimonio de la humanidad!!), muchas veces pienso lo mismo... el sudor gastado para construirlas, la gente que pasaría por allá, que harían el amor ocultos... ;)
Un abrazo enorme :)
Sí, sí entiendo perfectamente esa sensación...muy bien expresada...
Por cierto qué muralla es esa? es en Girona?, es que cuando fui había una que me parecía ésa...?Allí me encantaron las calles estrechas y medievales que vi...también Besalú, con su puente de piedra...todos caminando por el mismo mundo tal vez distinto en la forma pero el mismo SIEMPRE en el fondo...
Saludinos.
Donuttz... Habrá que ir a ver las de Tarragona... Un besico
Pulgacroft... Es la muralla de Ávila... Creo que me falta vida pa viajar... ays...
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