No sé lo que pasa cuando nos juntamos… Algún tipo de reacción química, física o ambas ocurre que nos hace retroceder en el tiempo, algo así como 17 o 18 años… con las ideas de bombero que eso conlleva…
La noche se presentaba tranquila… una cenita de tres parejas y unas copichuelas por ahí... pero nada es lo que parece en un principio… y…
Tata nos contó (a Bimbolla y a mí que las otras ya lo sabían) que lleva un mes compartiendo coche con un compañero en su nuevo trabajo… El compañero se casaba ese mismo día y no había podido averiguar si lo hacía con un chico o con una chica… Y estaba desquiciá haciendo mil conjeturas… (Con lo fácil que hubiera sido preguntarle el nombre de la pareja, oye)
De cachondeo, habían hablado, de ir esa tarde al pueblo dónde se casaba a investigar pero no lo habían hecho… “¿Dónde lo celebra?” Pregunta inocente que lancé al viento… Y…Lo sabía…
Pik y yo cruzamos una mirada, la que bastó pa convertirnos en quinceañeras… y empezamos a considerar la idea de colarnos en la boda entre risas, mientras Tata, que sabe de lo que somos capaces, ponía cara de pánico y no paraba de decir que ella no iba, y que si íbamos nosotras la iban a descubrir… y que se moría de vergüenza si eso pasaba…
Así que Leré, menos aventurera, en un principio, se quedó con Tata que no paraba de refunfuñar, en una cafetería cercana… Mientras Pik, Nor, Bimbolla y yo nos lanzábamos al ataque… Entramos andando al parking y disimulamos en la puerta mientras se fumaban un cigarro… en un descuido Pik y yo nos colamos dentro (a Nor y a Bimbolla les llegó la aventura solo hasta la puerta)… Dábamos un cante que no veas… todo el mundo vestido de boda y nosotras en vaqueros… Así que, sin atrevernos a mirar mucho a la gente, empezamos a andar mientras yo le decía… “Ve al servicio” señalando una puerta al fondo y allí nos dirigimos esperando que en cualquier momento nos echaran de allí (aun no estaban tan borrachos como pa que pasáramos desapercibidas) En cuanto estábamos a punto de alcanzar la puerta una chica nos para… “Oye!” Levantamos la vista, temerosas… “Si buscáis el servicio es allí… esto es la cocina” Entramos al servicio muertas de risa… Yo me quería quedar a ver si pillábamos alguna conversación pero Pik no hacía más que decir… “No hay novia… ¿ves? ¿Tú has visto a alguna? Vamos a ver si la vemos… Sal que aquí damos el cante más todavía que hay más luz” Y volvimos a salir fijándonos bien y nos pareció una boda muy “hetero” solo que sin novia vestida de blanco y eso… Llamamos a Tata por teléfono…
Yo: Tata…
Tata: No me nombres!!!! Te van a oír y me van a descubrir, que vergüenza!!! Venid ya pa acá…
Llegamos a la cafetería y seguimos con las conjeturas mientras Tata se quejaba de lo pésimas investigadoras que éramos… la muy puñetera… Y ahí se quedó la cosa… por un rato…
La noche dio pa más luego cuelgo el resto jajajajaja
Detective por unas horas... con persecución incluida (I)
lunes, 10 de noviembre de 2008Flipó Izel a las 18:44
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3 Cotilleos:
jajaja no me lo imagino!
Pues ya de hacer de detectives lo propio es que esperarais tomando algo a que llegara la novia/o y así lo averiguabais, no?
Que intriga ahora sin saber nada...tata tendrá que esperar a las fotos de la boda o de la luna de miel...
jeje cómo molan esos cotilleos eh?? jaja...
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